Erase una vez...
... un terrible fantasma que vivía en la cumbre de un castillo que era terriblemente oscuro. Y a él le gustaba la oscuridad. Y siempre soñaba con conquistar el mundo con sus dos bolas de poder.
Un día entró un niño a su castillo, era oscuro y tenía muchísimo miedo, se fue corriendo con todas sus fuerzas a una habitación. Y se encontró las dos bolas de poder. Cogió una, pero el fantasma le oyó y la bola de poder le dio un poder: correr muy rápido. Y se fue corriendo y siguió corriendo hasta que el fantasma le cogió. Y el niño no sabia nada que hacer. El fantasma le dijo: "Te coge rééééé" y el niño se acordó que a los fantasma les asustaba la luz. Y hoy hacia un día precioso fuera del castillo. Entonces se fue corriendo hasta que encontró la puerta principal y el fantasma vio la luz y se murió.
El niño se fue corriendo a su pueblo para contárselo todo a su familia.
Fin
Ricardo
2 comentarios:
No sé si podré dormir con estas historias que nos cuentas. Es una lástima que el fantasma se muriera. Tal vez la próxima vez puedas hacer en tu historia que el fantasma se haga amigo del niño y juntos resuelvan algún problema.
Un saludo,
Javier Madrigal
Ricardo : Esta bien tu historia , pero Don Javier tiene razon , se pdrian hacer amigos y el final seria mas bonito .
Animo .
Myriam del Toro
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